Albert Bandura nació el 4 de diciembre de 1925 en Canadá, estudió psicología en la Universidad de Columbia Británica en 1949 y posteriormente psicología clínica en la Universidad de Iowa para proseguir con su formación en Wichita y Stanford. Fue en Iowa donde conoció a Virginia Varns, con quien contrajo matrimonio y tuvieron dos hijas.
En sus primeros años en la Universidad de Stanford trabajó junto a uno de sus estudiantes de doctorado, Richard Walters. En 1959 ambos publicaron el libro «Agresión Adolescente» y en 1963 «Aprendizaje social y desarrollo de la personalidad».
En 1973 fue presidente de la Asociación Americana de Psicólogos (APA) y en 1980 recibió el Premio para las Contribuciones Científicas Distinguidas. Además, fue nombrado presidente de la Western Psychological Association.
Las teorías del aprendizaje por condicionamiento (clásico y operante) no explicaban muchas cuestiones del comportamiento social en los niños, de ahí que Bandura desarrollara nuevas perspectivas.
Al igual que Lev Vygotsky, Albert Bandura también centra su estudio sobre los procesos de aprendizaje en la interacción entre el niño y el entorno social.
Es el principal exponente de la teoría del aprendizaje social. Esta corriente de pensamiento argumenta que la práctica totalidad de los esquemas de roles no son innatos y no están determinados, sino que son aprendidos.

Bandura distingue dos procesos por los que los niños y niñas adquieren los valores y las normas sociales.
- Por enseñanza directa que realizan los adultos, bien como presentación de una conducta o a partir de acciones donde rompen normas sociales y ante lo cual el adulto enseña lo correcto y/o sanciona la infracción.
- Por imitación de conductas. Los niños aprenden por imitación de las conductas de sus padres y otras personas adultas dotadas de significación para ellos.
El niño, gracias a la interacción, aprende a valorar y demandar los cuidados y la presencia de los adultos. Así, comprende que cuando imita sus comportamientos, ellos responden con atenciones y mimos, que es lo que él verdaderamente necesita, creándose un círculo reforzador de conductas.
El aprendizaje social tiene tres factores importantes que influyen en los cambios psicológicos que requiere el proceso de aprendizaje:
- Los factores sociales.
- Los factores cognitivos.
- La conducta.
Un ejemplo claro sería el estudiante donde:
- Los factores sociales (o ambiente) = estímulos que recibe por parte de sus padres o profesores.
- Los factores cognitivos = expectativas que tiene el estudiante de su propio éxito.
- La conducta = sus hábitos de estudio.
Además, Bandura le otorga una gran importancia a la Autoeficacia, creencia de que uno puede dominar una situación y producir resultados positivos, ya que está relacionado con la motivación intrínseca y a través de ella el alumno aumenta su rendimiento académico, puesto que realizan las tareas de forma más persistente para lograr un objetivo.
Pero no todas estas conductas deben ser practicadas con anterioridad para que sean aprendidas, aquí entra el aprendizaje por observación, otro de los pilares de Bandura. Al observar otras conductas y las consecuencias de estas, el niño aprende nuevas respuestas sin tener que realizarlas. Además, su teoría defiende que esta observación está relacionada con la cognición.
Los estudios e investigaciones de Bandura acerca del aprendizaje observacional mostraron que los niños son capaces de aprender muchas cosas sin necesidad de realizarlas ni de recibir un refuerzo de forma directa, simplemente por la observación de la conducta de los demás y por la imitación.
Los componentes del aprendizaje por observación son:
- Adquisición y atención: el niño observa el modelo y reconoce los rasgos de la conducta.
- Retención y codificación simbólica: el niño almacena las conductas del modelo.
- Ejecución y reproducción: el niño acepta la conducta como correcta y con opciones de una recompensa o consecuencias positivas y la reproduce.
- Consecuencias: las conductas que reproduce pueden llevarle a consecuencias positivas o negativas.
Su experimento más famoso, donde explicó su teoría, fue el llamado “muñeco bobo”, realizado en 1961, y fue pionero en la observación de la conducta de agresividad en los niños. Bandura grabó este experimento en el cual se veía a un adulto golpeando a un muñeco inflable con aspecto de payaso para después enseñárselo a un grupo de niños y poder, así, observar su reacción.
La base de dicho experimento era demostrar que algunas conductas eran aprendidas por los niños a raíz de la imitación de modelos adultos. Participaron 36 niños y 36 niñas, de entre 3 y 5 años de edad, alumnos de la guardería de la Universidad de Stanford.
Se organizaron en tres grupos, 24 fueron expuestos al modelo agresivo, 24 al modelo no agresivo y los restantes al grupo control, después cada grupo fue dividido por sexos para que la mitad de estos estuvieran expuestos a la conducta de adultos de su mismo sexo y la otra mitad a la del sexo contrario.
Individualmente, tanto en el grupo agresivo como no agresivo, cada niño observaba las acciones que el adulto realizaba al muñeco bobo.
En el modelo agresivo podían ver cómo el adulto jugaba con los juguetes que había en la sala durante un minuto y después comenzaba a tener un comportamiento agresivo con el muñeco (le pegaba, insultaba, usaba un martillo de juguete para golpearle, etc.)
En el modelo no agresivo podían ver cómo el adulto jugaba, tanto con los juguetes como con el muñeco, de forma natural y pacífica.
El grupo de control no veía ningún tipo de vídeo.
Después de esto, cada niño fue pasando por la misma sala y con los mismos juguetes, y fueron grabados para que quedasen registrados sus comportamientos.
La conclusión de Bandura:
- Los niños expuestos al modelo agresivo actuaron de manera más violenta.
- Dentro de este mismo grupo, los niños mostraron más agresividad que las niñas.
- En relación a las diferencias de género, los niños estaban más influenciados por los adultos de su mismo género.
- Los niños expuestos al modelo no agresivo y el grupo de control actuaron de la misma manera.
En 1965 se repitió el experimento pero incorporando el premio o castigo de dicha conducta, el resultado fue el siguiente: Cuando los adultos eran recompensados por sus conductas agresivas, los niños tendían a golpear más al muñeco; cuando los adultos eran amonestados por sus conductas agresivas, los niños no golpeaban al muñeco.
REFERENCIAS:
- Bandura, A. (1980). La Teoría del Aprendizaje Social de Albert Bandura. Diciembre, 14, 2016.
- Bandura, A., & Rivière, Á. (1982). Teoría del aprendizaje social.
- Boeree, C. G. (2006). Albert Bandura: 1925-present. Personality Theories.