El concepto de genio se define como una persona que posee ciertas habilidades en inteligencia y en creatividad, y que ha inventado algo trascendental para la humanidad.
Según una de las definiciones de la RAE, el genio tiene la capacidad mental extraordinaria para crear o inventar cosas nuevas y admirables.
El talento es una habilidad específica en un sector en particular, como pueden ser las matemáticas, el arte o la música, entre otros. Así, la persona talentosa despunta en uno de esos campos, destacando entre el resto de gente.
Según la RAE, la persona talentosa es la que tiene talento, ingenio, capacidad y entendimiento, y el talento es esa habilidad que posee esa persona inteligente o apta para determinada ocupación.
Definitivamente, genio y talento no significan lo mismo, mientras el genio disfruta de diferentes habilidades en relación a la inteligencia y la creatividad, el talentoso muestra habilidades sobre un área concreta.
Según la definición de Jiménez (2000), el rendimiento escolar es un “nivel de conocimientos demostrado en un área o materia comparado con la norma de edad y nivel académico”.
Los alumnos de altas capacidades que obtienen en la escuela un bajo rendimiento normalmente tienen detrás varios factores que les está llevando a ese nivel académico.
Algunos de ellos pueden ser:
- Factores familiares como los conflictos entre los integrantes del conjunto familiar, un estilo permisivo o negligente por parte de los padres que les conlleve a tener bajas expectativas hacia el alumno.
- Baja motivación en el aula, aburrimiento por el bajo nivel que le supone el temario.
- Factores socioculturales y socioeconómicos que puedan desfavorecer al alumno.
- Aislamiento social o presión de los iguales para ser como ellos.
- Algún tipo de déficit o problema que aún no esté diagnosticado, como puede ser el TDAH, disincronías, TEA, DEA, etc.

Finalmente, muchos optan por abandonar su formación a causa de la frustración que les provoca las diferentes situaciones que vive en el centro escolar.
En este sentido, la escuela cobra una importancia fundamental para motivar a sus alumnos y despertarles un incesante interés en las clases, buscando nuevas metodologías y ayudándoles a que su rendimiento escolar sea el adecuado.
En relación a los alumnos de altas capacidades que obtienen en la escuela un alto rendimiento, sus características en comparación a los de bajo rendimiento son totalmente opuestas:
- En el ámbito familiar están centrados en el alumno, este le ofrece un soporte emocional estable y mantienen buenas relaciones entre los diferentes componentes de la familia. Su estilo educativo suele ser democrático y asertivo, respetando las normas sin surgir conflictos que puedan llevar a la desestabilización.
- Los factores socioculturales y socioeconómicos suelen ser favorables cara a su educación.
- Son alumnos con una gran integración social, sin problemas con sus iguales.
- Tienen un autoestima alto.
Además de estas características comunes y tan contrarias, los alumnos con un alto rendimiento gozan de una motivación tanto intrínseca como extrínseca, muestran iniciativa y son bastante autónomos en las tareas.